Ejemplo práctico de manipulación informativa

Aquí tenemos un ejemplo práctico de la manipulación informativa o campaña mediática que está en plena marcha para oponerse a la iniciativa de reforma constitucional a como dé lugar, no apelando a realidades concretas o argumentos válidos sino utilizando la distorsión, la mentira, la propaganda subliminal y cualquier otra herramienta que permita la siembra de temores irracionales en la psiquis de quienes todavía creen en ellos.

En este titular el diario El Nacional deja caer en la primera y muy superficial lectura que hace cualquier persona, la sugestión de que supuestamente la reforma constitucional establece que se debe trabajar los sábados debido a la reducción de la jornada laboral.

Si usted lee el titular que dice así: “Estudian jornada laboral de 7 horas para no tener que trabajar los sábados”…esa expresión “no tener” implica que si la jornada no es de 7 horas entonces se TIENE que trabajar los sábados lo cual es falso y además distorsionado sólo con el fin de producir reacciones en la gente.

Ya lo expliqué este post anterior, pero insisto nuevamente considerando la nueva manipulación en primera plana arrojada por este diario.

Hoy en día la jornada laboral diaria no debe exceder de las 8 horas y la jornada semanal no debe exceder de las 44 horas. Si usted multiplica 8 horas diarias por cinco días de la semana (de lunes a viernes) eso le da un total de 40 horas. Queda debiendo siempre 4 horas laborales (según el concepto de El Nacional y de los diseñadores de las campañas de terror de la oposición) que, hasta donde yo sé no las hacen trabajar a nadie los días sábado. Salvo aquellos acuerdos contractuales particulares en donde se establezca.

En mi caso personal no he trabajado ningún sábado para cubrir las 4 horas que faltan de cada jornada semanal actual ¿y usted?...

¿Por qué habría de ser diferente con una jornada laboral reducida a un máximo de 6 horas diarias y a un máximo de 36 horas semanales? Hay que recordar que el artículo establece NO EXCEDER ciertas cantidades de horas. No coloca límites inferiores.

Eso nada más se les ocurre a las calenturientas mentes de los irresponsables dirigentes de la oposición político/mediática para buscar desprestigiar como sea el proyecto de reforma constitucional. Apelan, como dije antes, a la mentira, la manipulación y el terror antes que argumentar seriamente realidades o preocupaciones concretas. De allí que su credibilidad esté en el sub-sótano y sus posibilidades como alternativa política se hacen cada vez más y más remotas.